Giovanni dei Crescenzi Ottaviani o Giovanni di Sabina, fue un obispo que ocupó el podio papal durante 20 días en el año 1045. La mayor parte de las fuentes indican que fue un antipapa y existen unas pocas que lo mencionan como el papa n.º 146 de la Iglesia católica.
La mayor parte coincide en que la forma en que ocupó por 20 días el podio pontificio lo sitúan como antipapa. elegido por una facción, cuando tuvo lugar la expulsión de Benedicto IX; este volvió tres meses después y le obligó a huir y a cederle el puesto.
Fue condenado en el Concilio de Sutri (1046) a terminar sus días en un monasterio.
Síntesis biográfica
Silvestre III fue papa entre el 20 de enero y el 10 de febrero de 1045. Era obispo de Sabina cuando fue elegido papa por una facción que había expulsado al papa Benedicto IX de Roma. Sin embargo, al mes siguiente los simpatizantes de Benedicto expulsaron a su vez a Silvestre.
Envuelto en el escándalo, Benedicto se sintió tan inseguro en Roma que dimitió del papado en favor de su padrino, el arcipreste Juan Graciano, una figura de alto nivel moral. Posteriormente, un nuevo papa, Gregorio VI, fue consagrado en mayo de 1045.
Después de recibir un buen pago, bien de Gregorio o de sus ayudantes, Silvestre reconoció a Gregorio y regresó a su antiguo obispado en Sabina.
Cuando Benedicto posteriormente intentó recuperar el papado y destituir a Gregorio, el emperador Enrique III ordenó a Gregorio que convocara el concilio de Sutri en diciembre de 1046, que destituyó a Silvestre y a Gregorio.
En un sínodo romano tres días más tarde, Benedicto fue declarado destituido y el papa Clemente II fue elegido y consagrado. La sentencia de destitución de Silvestre sobrevive en los documentos publicados por él como obispo de Sabina durante 1046. La legitimidad de su elección es disputada y algunos le catalogan de antipapa.
Muerte
Muere en 1063 en el Monasterio de Sabina, Italia, ejerciendo como Obispo.
Síntesis biográfica
Silvestre III fue papa entre el 20 de enero y el 10 de febrero de 1045. Era obispo de Sabina cuando fue elegido papa por una facción que había expulsado al papa Benedicto IX de Roma. Sin embargo, al mes siguiente los simpatizantes de Benedicto expulsaron a su vez a Silvestre.
Envuelto en el escándalo, Benedicto se sintió tan inseguro en Roma que dimitió del papado en favor de su padrino, el arcipreste Juan Graciano, una figura de alto nivel moral. Posteriormente, un nuevo papa, Gregorio VI, fue consagrado en mayo de 1045.
Después de recibir un buen pago, bien de Gregorio o de sus ayudantes, Silvestre reconoció a Gregorio y regresó a su antiguo obispado en Sabina.
Cuando Benedicto posteriormente intentó recuperar el papado y destituir a Gregorio, el emperador Enrique III ordenó a Gregorio que convocara el concilio de Sutri en diciembre de 1046, que destituyó a Silvestre y a Gregorio.
En un sínodo romano tres días más tarde, Benedicto fue declarado destituido y el papa Clemente II fue elegido y consagrado. La sentencia de destitución de Silvestre sobrevive en los documentos publicados por él como obispo de Sabina durante 1046. La legitimidad de su elección es disputada y algunos le catalogan de antipapa.
Muerte
Muere en 1063 en el Monasterio de Sabina, Italia, ejerciendo como Obispo.